La mayoría de las veces en que la cabeza nos duele, se
relaciona con algún sector de nuestro organismo. Presionando algunos
segundos en estas zonas y/o masajeándolos despacito, podremos no sólo
entender qué anda mal en nosotros, sino también curarnos el dolor.
Preste atención.
1. Por encima de las lagrimales y debajo de las cejas.
Presione el huesito.
Y mientras duele tome aire profundamente.
Retenga unos segundos y exhale.
2. A los dos costados de la nariz, justo de cada lado de los orificios nasales.
Si hunde sus gemas ligeramente, podrá notar unas cavidades craneales. Presione en ese punto con los dedos índice, colocándolos horizontalmente con respecto a la nariz.
Mientras presione y duela, inspire profundamente. Retenga iluminando el dolor y exhale expulsándolo de su cuerpo.
3. Coloque un sólo índice de manera vertical en relación a la nariz, presionando justo sobre el hueso que sentirá debajo del pliegue que divide los orificios nasales y pegado al bozo, que se encuentra por encima de sus labios. Presione. Inspire y exhale.
4. Encima de su pera y por debajo de sus labios (siempre sobre la misma línea vertical de la nariz), intente encontrar el punto exacto de dolor.
Sentirá que está presionando las encías inferiores, pero en verdad, estará conectándose con un nervio importante que conecta con la cabeza. Aconsejo que también se estiren las orejas y estiren (haciendo monadas) sus rasgos faciales.
Los puntos de las sienes suelen ser otro punto más habitual.
Si el dolor no pasa, entonces masajee su rostro en estos puntos que muestra el gráfico hasta encontrar el meollo de la cuestión! Solo manifieste el deseo de autosanarse y podrá conseguirlo. Créame, en 5 minutos podrá curarse el dolor de cabeza que una pastilla sólo alcanzará a dormir para volver a despertar, tal vez ahí mismo o en otro lugar.
Tomemos conciencia de que somos.
Comentario: A diario tenemos influencias externas que pueden ser las causantes del estrés o dolores de cabeza fuertes, saber conocer nuestro cuerpo es la clave para poder solucionar el problema.
La meditación por medio de las respiraciones para estimular el nervio vago pueden ser de gran ayuda no sólo para jaquecas sino cualquier otro dolor, toxinas que afecten nuestro organismo o combatir el estrés en general.
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FUENTE SOTT.NET-
http://barcelonalternativa.es/
LA IDEA DE DIOS.http://laideadedios.blogspot.com.ar/ |